Capítulo 12: Soporte a los profesores e instructores en la era digital
Figura 6.16 Un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo. Imagen: © Carol Mase, Free Management Library, 2011, utilizada con autorización
12.7.1 La razón para el cambio
Este libro realmente expone el caso de la formación en los métodos de enseñanza, o más exactamente en un enfoque diferente de formación para los profesores, instructores y el personal con el objetivo de formar estudiantes plenamente preparados para la vida en la era digital. El argumento es el siguiente:
- Hay una creciente presión de los empleadores, la comunidad empresarial, los propios alumnos, y también de un número significativo de educadores, para que los alumnos desarrollen el tipo de conocimiento y las competencias que van a necesitar en la era digital.
- En la era digital, donde todo el “contenido” será de libre acceso a través de Internet, será necesrio que los graduados tengan experiencia en:
- la gestión del conocimiento (la capacidad para encontrar, evaluar y aplicar adecuadamente el conocimiento)
- el conocimiento y las competencias de las tecnologías de la información TI
- la habilidad de la comunicación interpersonal, incluyendo el uso adecuado de los medios sociales
- la habilidad del estudio independiente y de formación continua
- las competencias intelectuales, entre ellas:
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- la construcción del conocimiento
- el razonamiento
- el análisis crítico
- la resolución de problemas
- la creatividad
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- el aprendizaje colaborativo y trabajo en equipo
- la flexibilidad y la multiprocesamiento
Estas son todas las competencias relevantes para cualquier área temática que deberán incorporarse en el contexto de aplicación. Con tales competencias, los graduados estarán mejor preparados para un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo.
- Para desarrollar este tipo de conocimiento y competencias, los profesores e instructores necesitan establecer objetivos de aprendizaje claros y seleccionar los métodos de enseñanza que apoyen el desarrollo de dichos conocimientos y competencias, y, dado que todas las competencias requieren práctica y retroalimentación para su desarrollo, los estudiantes deben tener muchas oportunidades para practicar dichas competencias. Para esto hay que salir del modelo de transmisión de información a una mayor participación de los estudiantes, más enseñanza centrada en el alumno, y los nuevos métodos de evaluación que midan el dominio de las competencias, además del dominio del contenido.
- Debido a la creciente diversidad de estudiantes, desde alumnos de grado presenciales a estudiantes de formación continua o desde aquellos con altos niveles de educación postsecundaria a estudiantes que han abandonado el sistema escolar formal y buscan segundas oportunidades, y gracias a la capacidad de las nuevas tecnologías de la información para facilitar el acceso a la educación en cualquier momento y en cualquier lugar, se necesita una mayor variedad de modalidades de distribución como la presencial en el aula, la semipresencial mixta o híbrida y la totalmente online o a distancia, tanto en contextos de educación formal como informal.
- La decisión de optar por una modalidad semipresencial, híbrida u online y un mayor uso de las tecnologías de aprendizaje ofrece más opciones y alternativas a los profesores e instructores. Para utilizar bien estas tecnologías, los profesores e instructores deben no sólo identificar las fortalezas y debilidades de los diferentes tipos de tecnología sino también saber cómo aprenden mejor los estudiantes. Para ello es necesario conocer:
- las investigaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje;
- diferentes teorías del aprendizaje relacionadas con diferentes tipo de conocimiento;
- diferentes métodos de enseñanza y sus fortalezas y debilidades.
Sin este fundamento básico, es difícil para los profesores e instructores alejarse del único modelo con el que están familiarizados, a saber, la clase magistral y el modelo del debate, que es limitado en cuanto al desarrollo de los conocimientos y las competencias necesarias en la era digital.
- El problema es particularmente grave en las universidades ya que no hay ningún requisito de formación o cualificación docente para trabajar en una universidad en la mayoría de los países occidentales. Sin embargo, la enseñanza ocupará un mínimo del 40 % del tiempo del profesor y mucho más para los profesores adjuntos o contratados o los instructores de dedicación exclusiva. No obstante, en menor grado, los maestros de escuela y los profesores universitarios enfrentan el mismo reto: cómo garantizar que los profesionales con experiencia tengan los conocimientos y competencias necesarias para enseñar bien en la era digital.
- Las instituciones pueden hacer mucho para facilitar o impedir el desarrollo de los conocimientos y competencias de la era digital. Necesitan:
- asegurar que el personal de todos los niveles de enseñanza e instrucción tengan la capacitación adecuada en el uso de las nuevas tecnologías y los métodos de enseñanza necesarios para el desarrollo del conocimiento y las competencias necesarias en la era digital;
- asegurar que se ofrezca el apoyo adecuado en las tecnologías educativas a profesores e instructores;
- asegurar que las condiciones de empleo y en particular del tamaño de las clases permitan que los docentes puedan enseñar en formas que faciliten el desarrollo del conocimiento y las competencias necesarias en la era digital;
- desarrollar una estrategia institucional práctica y coherente para dar soporte al tipo de enseñanza requerido en la era digital
12.7.2 La construcción de su propio futuro
A pesar de que los gobiernos, las instituciones y los propios alumnos intervengan en el proceso enseñanza, al final de cuentas la responsabilidad y en cierta medida el poder de cambiar recae en los profesores e instructores. Probablemente no haya otra profesión que provea la oportunidad de trabajar de la manera que usted elija.
Para ayudarlo a crear el tipo de enseñanza para la era digital, el Anexo 1 le propone el ejercicio de construir un entorno de aprendizaje enriquecido para sus estudiantes aplicando los lineamientos que se describen en este libro.
A pesar de que es importante tener una base sólida de conocimientos y experiencia, la visión y la imaginación son cualidades primordiales de los docentes. Este libro intenta proporcionar una visión de las posibilidades de la educación en el futuro, aunque ese futuro todavía tiene que ser inventado. Las exigencias del mercado, los retos éticos y morales de la sociedad, los cambios tecnológicos y la diversidad de necesidades de aprendizaje son todos los componentes de una mezcla compleja de factores que requerirán de una respuesta adecuada de los profesores e instructores.
Este libro intenta dar algunas bases para la toma de decisiones en este mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo, y finaliza con el Escenario J que tiene como objetivo proponer alternativas para el futuro, sin embargo, será la imaginación de los docentes la que inventará nuevas formas de enseñanza que eventualmente formarán al tipo de graduados que el mundo necesitará en el futuro. Espero que este libro de alguna manera lo ayude a lo largo de ese camino.
Actividad 12.7 Desarrollar un escenario futuro para su enseñanza
- Lea el Escenario J y/o los otros escenarios en este libro. Ahora escriba su propio escenario para su propia enseñanza. NO tenga en cuenta los recursos actuales o las políticas institucionales.
- ¿Qué tendría que cambiar en su organización para que su escenario sea posible?
Key Takeaways
Ideas Claves (de todo el libro)
- Hay una creciente presión de los empleadores, la comunidad empresarial, los propios alumnos, y también de un número significativo de educadores, para que los alumnos desarrollen el tipo de conocimiento y de competencias que van a necesitar en la era digital.
- El conocimiento y las competencias que los graduados necesitarán desarrollar para la era digital, donde todo el “contenido” será cada vez más de libre acceso a través de Internet, estará relacionado con una mayor experiencia en:
- gestión del conocimiento (la capacidad para encontrar, evaluar y aplicar adecuadamente el conocimiento);
- conocimiento y destrezas de TI;
- habilidad de comunicación interpersonal, incluyendo el uso adecuado de los medios sociales;
- habilidad de estudio independiente y de la formación continua;
- competencias intelectuales, entre ellas:
- o la construcción del conocimiento;
- o el razonamiento;
- o el análisis crítico;
- o la resolución de problemas;
- o la creatividad;
- aprendizaje colaborativo y trabajo en equipo;
- flexibilidad y multiprocesamiento.
Estas son todas las competencias y destrezas relevantes para cualquier área temática y por tanto deben aprenderse en el contexto de aplicación. Con tales competencias, los graduados estarán mejor preparados para un mundo volátil, incierto, complejo y ambiguo.
- Para desarrollar este tipo de conocimientos y competencias, los profesores e instructores necesitan establecer objetivos de aprendizaje claros y seleccionar los métodos de enseñanza que apoyen el desarrollo de dichos conocimientos y competencias. Dado que el desarrollo de todas las destrezas requieren práctica y retroalimentación para su desarrollo, los estudiantes deben tener muchas oportunidades de práctica. Para lograrlo, hay que salir del modelo de transmisión de información a uno de mayor participación de los estudiantes, más enseñanza centrada en el alumno, y nuevos métodos de evaluación que evalúen el dominio de competencias, además del dominio del contenido.
- Debido a la creciente diversidad de estudiantes, desde alumnos de grado presenciales a estudiantes de formación continua o desde aquellos con altos niveles de educación postsecundaria a estudiantes que han abandonado el sistema escolar formal y buscan segundas oportunidades, y debido a la capacidad de las nuevas tecnologías de la información para facilitar el acceso a la educación en cualquier momento y en cualquier lugar, se necesita una mayor variedad de modalidades de distribución o impartición como la presencial en el aula, la semipresencial mixta o híbrida y la totalmente online o a distancia, tanto para los contextos de educación formal e informal.
- La decisión de optar por una modalidad semipresencial, híbrida u online y de optar por un mayor uso de las tecnologías de aprendizaje ofrece más alternativas a los profesores e instructores. Para implementar bien estas tecnologías, los profesores e instructores no sólo deben identificar sus fortalezas y debilidades sino también deben tener un buen conocimiento de cómo aprenden mejor los estudiantes. Para ello es necesario conocer:
- las investigaciones sobre la enseñanza y el aprendizaje;
- diferentes teorías del aprendizaje relacionadas con diferentes tipo de conocimiento;
- diferentes métodos de enseñanza y sus debilidades y fortalezas;
Sin este fundamento básico, es difícil para los profesores e instructores alejarse del único modelo con el que están familiarizados, es decir, la clase magistral y el modelo del debate, que es limitado en cuanto al desarrollo de los conocimientos y las competencias necesarias en la era digital.
- El problema es particularmente grave en las universidades, ya que no hay ningún requisito de formación docente para trabajar en una universidad en la mayoría de los países occidentales. Sin embargo, la enseñanza ocupará un mínimo del 40 % del tiempo del profesor y mucho más para los profesores adjuntos o contratados o los instructores de dedicación exclusiva. No obstante, en menor grado, los maestros de escuela y los profesores universitarios enfrentan el mismo reto: cómo garantizar que los profesionales con experiencia dominen los conocimientos y competencias necesarias para enseñar bien en la era digital.
- Las instituciones pueden hacer mucho para facilitar o impedir el desarrollo de los conocimientos y competencias para la era digital y deben:
- asegurar que el personal de todos los niveles de enseñanza e instrucción tengan la capacitación adecuada en el uso de las nuevas tecnologías y los métodos de enseñanza necesarios para el desarrollo del conocimiento y las competencias necesarias en la era digital.
- asegurar que se ofrezca el apoyo adecuado a los profesores e instructores en el uso de las tecnologías educativas;
- asegurar que las condiciones de empleo y en particular del tamaño de las clases permitan que los docentes puedan enseñar en formas que permitan el desarrollo del conocimiento y las competencias necesarias en la era digital.
- desarrollar una estrategia institucional práctica y coherente para dar soporte al tipo de enseñanza requerido en la era digital;
- A pesar de que los gobiernos, las instituciones y los propios alumnos pueden contribuir para asegurar el éxito de la enseñanza y el aprendizaje, al final la responsabilidad y en cierta medida el poder de cambiar recae en los profesores e instructores.
- Dependerá de la imaginación de los docentes proponer nuevas formas de enseñanza para formar al tipo de profesional que necesitará el mundo en el futuro.