2.3 Objetivismo y conductismo
Figura 2.3.1 El sistema solar: ¿un hecho objetivo? – Imagen: © International Astronomical Union/Wikipedia
2.3.1 La epistemología objetivista
Los objetivistas creen que existe un conjunto de hechos objetivos y fiables, principios y teorías que, o bien han sido descubiertos y delineados o que lo serán en el transcurso del tiempo. Esta posición está vinculada a la creencia de que la verdad existe fuera de la mente humana, e independientemente de lo que un individuo puede o no creer. Por lo tanto, las leyes de la física son constantes, aunque nuestro conocimiento de ellas puede evolucionar a medida que descubrimos la “verdad”.
2.3.2 Los enfoques objetivistas de enseñanza
Un profesor que opera principalmente desde una perspectiva objetivista es probable que considere que un curso debe presentar un conjunto de conocimientos que hay que aprender, que pueden consistir en hechos, fórmulas, terminología, principios, teorías, entre otros.
La transmisión efectiva de este conjunto de conocimientos se torna de central importancia. Las clases y los libros de texto deben ser validados, informativos, organizados y claros. La responsabilidad del estudiante es comprender, reproducir y mejorar el conocimiento transmitido en el marco epistemológico de la disciplina, basado en la evidencia empírica y en la prueba de las hipótesis. Las tareas del curso y los exámenes consistirán en que los alumnos proporcionen “respuestas correctas” y justificadas. El pensamiento original o creativo debe limitarse a los estándares del enfoque objetivista -en otras palabras-, el desarrollo de nuevos conocimientos debe cumplir con los rigurosos estándares de las pruebas empíricas dentro de los marcos teóricos acordados.
Un docente “objetivista” tiene que ejercer el control sobre qué y cómo aprenden los estudiantes, sobre la elección de lo que es importante aprender, la secuencia, las actividades de aprendizaje, y cómo evaluar a los alumnos.
2.3.3 El conductismo
Aunque se desarrolló en la década de 1920, el conductismo sigue dominando los enfoques de enseñanza y aprendizaje en muchos lugares, sobre todo en los EE.UU. El conductismo es una teoría de aprendizaje objectivista. La psicología conductista es un intento de modelar el estudio del comportamiento humano con los métodos de las ciencias físicas, y por lo tanto centra la atención en los aspectos de la conducta que facilita la observación directa y la medición. La idea central del conductismo es que ciertas respuestas mecanicistas e invariables se asocian con ciertos estímulos específicos. Por lo tanto, cierto estimulo evocará una respuesta en particular. En su expresión más simplificada, sería una acción refleja puramente fisiológica como la contracción del iris del ojo cuando es estimulado con una luz brillante.
Sin embargo, el comportamiento humano es más complejo. Los conductistas han demostrado en los laboratorios que es posible a través de mecanismos de recompensa o castigo reforzar la asociación entre un estímulo o evento en particular y una respuesta conductual particular. El lazo formado entre el estímulo y la respuesta dependerá de la existencia de un medio adecuado que refuerce el momento de la asociación entre el estímulo y la respuesta. Esto dependerá de que el comportamiento aleatorio (prueba y error) sea reforzado adecuadamente en el momento en el que ocurre.
Esencialmente, se trata del concepto de condicionamiento operante, un principio desarrollado por Skinner (1968). Él demostró que se podía entrenar a las palomas en comportamientos bastante complejos, recompensando determinadas respuestas, que inicialmente podrían ocurrir al azar con estímulos adecuados tales como el suministro de bolitas de comida. También demostró que se podía desarrollar una cadena de respuestas sin la necesidad de un estímulo, sino a través de la vinculación de un estímulo remoto con un comportamiento más complejo. Por otra parte, el comportamiento inadecuado o aprendido previamente podría ser eliminado al retirar el refuerzo. El refuerzo en los seres humanos puede ser muy simple, como obtener una respuesta inmediata para una actividad u obtener una respuesta correcta a una prueba de opción múltiple.
Figura 2.3.3 Video de YouTube sobre B.F. Skinner demostrando su máquina de enseñar. Hacer clic sobre la imagen para ver el video.
Se puede ver una película fascinante de cinco minutos donde B.F. Skinner describe su máquina de enseñar en una película de 1954 capturada en YouTube, acceda haciendo clic en la imagen de arriba o en: http://www.youtube.com/watch?v=jTH3ob1IRFo (Vale destacar que el concepto de que cada niño que trabaja a su propio ritmo con retroalimentación automática es el mismo principio que se incorpora hoy en día en las aplicaciones «aprendizaje personalizado» de la inteligencia artificial. Ver Capítulo 9.4)
En el enfoque conductista subyace la creencia que el aprendizaje se rige por principios invariables, y que estos principios son independientes del control consciente por parte del alumno. Los conductistas intentan mantener un alto grado de objetividad en su forma de ver la actividad humana, y por lo general rechazan la referencia a estados no medibles, como los sentimientos, actitudes y la conciencia. El comportamiento humano está por encima de todo y se considera predecible y controlable. El conductismo por tanto proviene de una posición epistemológica fuertemente objetivista.
La teoría del aprendizaje de Skinner proporciona la base teórica subyacente para el desarrollo de las máquinas de enseñanza, los objetivos de aprendizaje medibles, la enseñanza asistida por computadora, y las pruebas de opción múltiple. Con frecuencia, está implicito en la aplicación de la inteligencia artificial la modificación del comportamiento humano. La influencia del conductismo es todavía fuerte en la formación corporativa y militar, y en algunas áreas de la ciencia, la ingeniería y la formación médica. Puede ser de particular importancia para el aprendizaje de memoria de hechos o procedimientos estándares, como las tablas de multiplicar, para la enseñanza a niños o adultos con capacidad cognitiva limitada debido a trastornos cerebrales, o para el cumplimiento de normas o procesos industriales o comerciales que son invariables y no requieren de valoración personal. También es la metodológia subyacente en los medios sociales como Facebook al influir sobre el comportamiento a través de los «me gusta» «likes», el número de visitas y conexiones y las recompensas por «status» «estado».
El conductismo, con el énfasis en la recompensa y el castigo como motores del aprendizaje que resultan en respuestas pre-definidas y medibles, es la base de concepciones populistas de aprendizaje entre muchos padres, políticos y debería destacarse que entre los científicos informáticos interesados en el aprendizaje automatizado. No es sorprendente entonces que ha habido una tendencia hasta hace poco de ver la tecnología, y en particular la instrucción asistida por computadora, estrechamente vinculada con el enfoque conductista de aprendizaje; sin embargo veremos en el Capítulo 5, Sección 4 que las computadoras no necesariamente tienen que ser utilizados en una manera conductista.
Por último, aunque el conductismo es un enfoque “objetivista” de enseñanza, no es la única manera de enseñar “objetivamente”. Por ejemplo, el aprendizaje basado en problemas puede también aplicar un enfoque muy objetivo hacia el conocimiento y el aprendizaje.
Referencias
Skinner, B. (1968) The Technology of Teaching, New York: Appleton-Century-Crofts
Actividad 2.3 Definición de los límites del conductismo
- ¿Qué áreas del conocimiento piensa que se podrían “enseñar” o aprender a través de un enfoque conductista?
- ¿Qué áreas del conocimiento piensa que NO se podrían enseñar adecuadamente con un enfoque conductista?
- ¿Cuáles son sus razones?
Para escuchar mis respuestas a estas preguntas, haga click en el siguiente podcast:
AUDIO – Escuche este podcast en ES
TEXTO – Lea este podcast en ES 2.3
Es fácil caer en una trampa aquí. Estoy pensando que la ciencia y la ingeniería, que se basan en una
epistemología objetiva, se enseñan mejor a través de un enfoque conductista. Y que
las humanidades no son adecuadas para este enfoque. Sin embargo, como siempre, depende.
Un enfoque conductista puede ser valioso para los estudiantes de ciencias novatos, para establecer teorías de hechos básicos y metodología experimental. Aunque, pensar científicamente requiere
algo más que memorizar, requiere cuestionamiento, pensamiento crítico, y pensamiento creativo para generar hipótesis y experimentos decuados. Carl Wyman ha desarrollado un modelo para
buscar tales mejoras en la enseñanza de las Ciencias.
Del mismo modo, las humanidades se pueden enseñar de una manera conductista. La primera ministra de Gran Bretaña, Margaret Thatcher, una química de profesión, argumentó que los niños deberían aprender los hechos importantes de la historia británica, como las fechas, las batallas exitosas y las personas importantes lo que refiere a un enfoque conductista para la enseñanza de la historia. Un mejor enfoque es tener claros los objetivos de aprendizaje y, en particular , las competencias que se está tratando de desarrollar. El conductismo funciona bien para la memorización y no tanto para el pensamiento crítico. Sin embargo, el conductismo puede ser necesario, puede ser una base necesaria sobre la que construir el pensamiento crítico.