Una reseña desde la perspectiva de la edución digital: Estrategias de educación digital, Ryerson University
Por Leonora Zefi y su equipo de Digital Education Strategies de la Escuela de Formación Continua G. Raymond Chang de la Ryerson University, Toronto, Ontario, Canadá
La opinión colectiva como equipo dedicado a proveer soporte a los instructores que usan las tecnologías educativas como un instrumento para la enseñanza, es que el último trabajo del Dr. Tony Bates Teaching in a Digital Age, se ha concentrado en los aspectos prácticos de la realidad que implica acompañar el cambio pedagógico en la educación superior. Luego de décadas de contribución al desarrollo del conocimiento y al discurso sobre la tecnología educativa, incluídos los doce libros relacionados con la temática, Bates nuevamente ofrece a los educadores de todo el mundo el regalo de un recurso para acompañar los cambios de cara al futuro que nos dejan perplejos. Este libro es un modelo en muchos aspectos. Es publicado en un formato abierto –una tendencia, que admite el debate pero que implica una forma de difundir el conocimiento que deben conocer todos los que se dedican a la investigación y a la educación
Bates (2014) ofrece al libro como un “formador” entrenador que da soporte a los instructores para motivar la necesaria “reflexión” y ofrece el conocimiento para que nuestros alumnos sean estudiantes exitosos en los entornos de aprendizaje que son cada vez mediados por las tecnologías. (p. 1). El trabajo le da espacio a la analogía del entrenador coach a tal punto que ofrece un regimen realístico de formación que ayuda a reforzar el diseño instruccional y la capacidad de toma de decisión de los instructores y los administradores educativos. Sin embargo, así como los artefactos y los contenidos de tecnología –la enseñanza debe ser estratégicamente organizada y presentada para ayudar efectivamente a los alumnos. Las ideas y los comentarios de Bates necesitan una mayor organización para optimizar los beneficios para la audiencia.
Una de las grandes fortalezas de Teaching in a Digital Age es que Bates “sabe de lo que habla” y facilita activamente la enseñanza en lugar de transmitir pasivamente el conocimiento. Desde el comienzo, Bates explica claramente porque los temas y los objetivos planteados son importantes y como harán una diferencia significativa en la práctica profesional de su audiencia. Para dar crédito a su trabajo y sus observaciones, guía al lector a través de referencias y enlaces web de diversos recursos muy valiosos. Comparte teorías y conceptos a través de escenarios que son ejemplos prácticos extraídos del mundo real y casos de estudio de una variedad de instituciones de educación superior. Como buen facilitador, Bates presenta el contenido en diferentes formatos, incluye texto y medios enriquecidos como videos, fotos, diagramas e ilustraciones. Las actividades de aprendizaje y las preguntas que guían la reflexión motivan a los lectores inmediatamente a aplicar las ideas de Bates a sus propios contextos y tareas. De esta manera, el libro es una extraordinaria impresión sobre la pedagogía efectiva en todos enfoques de la enseñanza y el aprendizaje.
Los Capítulos 6 a 8 de Teaching in a Digital Age guían al lector a través del mundo la tecnología educativa y los nuevos medios. Estos capítulos son “de lectura obligatoria” para los instructores y diseñadores de cursos que están explorando los diferentes medios de comunicación para incorporarlos a sus cursos. Bates presenta su modelo SECTIONS que fue previamente publicado com un marco sobre cuándo, cómo y por qué se deben incorporar los medios y las tecnologías en la educación, y de manera realista refleja las complicaciones que pueden surgir durante su implementación. Estos capítulos son muy completos y ofrecen diversas pautas para la toma de decisión, que se podrían ampliar evaluando por ejemplo el impacto de las tecnologías móviles en la elección de medios y los requerimientos de accesibilidad.
La elección estratégica de Bates de ofrecer un proceso transparente y abierto es un reto para la organización y la claridad del libro. Previo a su lanzamiento oficial, el libro circuló entre colegas y los lectores de su blog, una amplia comunidad profesional, con el fin de nutrirse con sus comentarios. El tipo de comentarios que surgió de esas consultas fue innegablemente valioso, y no puede reemplazar la edición profesional que ofrecen por lo general las editoriales comerciales.
Por ejemplo, luego de definir una base sólida práctica y teórica sobre las teorías del aprendizaje y los métodos de enseñanza en los Capítulos 1 a 4, Bates ofrece un capítulo completo y extenso a evaluar el tema controversial e inevitable de los MOOC – Cursos Masivos, Abiertos y Online (Capítulo 5). Es correcto que un libro como este reconozca y evalue esta tendencia, dado el impacto y alcance que ha tenido en el campo (que Bates menciona en muchos capítulos), sin embargo, el flujo del libro se hubiese beneficiado si alguno de los mensajes del Capítulo 5 estuviera redistribuídos a lo largo del libro. De la misma manera, el Capítulo 9, que examina las modalidades de distribución, podría integrarse más efectivamente en la primera parte del libro, es decir, a continuación de los capítulos sobre metodología (Capítulos 3 y 4). Por otra parte, las secciones “Ideas Claves” son una característica muy valiosa del libro que se incluyen tanto al comienzo como al final de cada capítulo. Al final de cada capítulo, una sola instancia de esta sección, podría también ayudar a recapitular el contenido. Trabajar con la secuenciación y repetición de estas ideas ayudará a mejorar el impacto del mensaje de Bates.
Luego de identificar los aspectos extraordinarios y problemáticos del libro, se concluye que Bates ha compartido la abundacia de su conocimiento destacado de manera entusiasta y accesible. Los lectores que no están familiarizados con sus publicaciones previas son convocados a enfrentar los temas fundamentales del área de la tecnología educativa. Los seguidores fieles, en este trabajo encontrarán, como siempre, el análisis práctico y útil de Bates sobre el estado del arte en el campo. Fundamentalmente, dado que el formato del libro es abierto, los lectores podrán tomar de él lo que se adapte mejor a sus necesidades y contexto de aprendizaje, su estilo profesional y su contexto de enseñanza. De hecho, Bates remarca en la introducción que el libro puede utilizarse de diversas maneras. Dada la afirmación de Bates que el libro es un “trabajo en progreso”, considerar la organización y secuenciación de sus próximos materiales ayudará a los lectores a obtener el mismo provecho de cada capítulo y cada componente de este trabajo.
Una señal de verdadera pasión por el trabajo de toda una vida es el compromiso por el progreso y la evolución del campo. Tony Bates es un ejemplo destacado de esto, y lo demuestra a lo largo de su libro y a través de su dedicación a la mejora continua.
Recibido: el 26 de juno de 2015